¿Quién es Robbie Ryan?

El director de fotografía Robbie Ryan es el protagonista de este blog. En este artículo, analizaremos su estilo, filosofía, técnicas y equipos utilizados. Su flexibilidad, uso de la luz natural, la textura y la representación tan auténtica de los personajes son algunas de las características más representativas de su estilo.

Sus cámaras favoritas son las Arri y gracias a su adaptabilidad ha trabajado con múltiples directores entre los que destacan Noah Baumbach, Ken Loach, Andrea Arnold y Yorgos Lanthimos.

Robbie Ryan nació en Dublín, Irlanda, el 24 de abril de 1965. Ya desde pequeño le interesaba el mundo de la fotografía, por ello, cuando tenía 14 años su padre le regaló una cámara para grabar un corto. Nada más terminar el colegio, entró en un instituto de arte en el que realizó un curso de cinematografía. Tras graduarse se marchó a Londres para trabajar en la industria y comenzó grabando anuncios y vídeos musicales de la mano de Daniel Wolf.

Robbie Ryan, director de fotografía

La versatilidad de Robbie Ryan depende mucho del estilo del director con el que trabaje. Ken Loach es simple y económico, mientras que el director Yorgos Lanthimos trabaja con una visual mucho más experimental y provocativa, como hemos podido observar en su último trabajo «Poor Things» (2023).

“Creo que como director de fotografía tienes que estar en sintonía con lo que quiera el director, en el caso de Ken, intento ver qué piensa. Él ha estado pensando durante tanto tiempo que ya tiene un enfoque establecido para hacer la película, por ello, como director de fotografía tienes que encajar sus ideas en ese estilo”.

La luz natural es uno de los factores más relevantes en la fotografía de Robbie Ryan. La mayoría de los directores con los que trabaja buscan que los personajes de las películas estén integrados en el mundo. Gracias a la luz natural y simple es capaz de crear este ambiente realista.

La filosofía de Robbie se podría definir como simple. Esto se ve considerablemente reflejado en la preproducción y posproducción de sus largometrajes. Para películas de Ken Loach ha estado trabajando tan solo tres días en la preproducción y ninguno en la posproducción. Él mismo declara que cuando graba imágenes para una película estas son las que captura en el momento, no hay que estar horas y horas trabajando en la posproducción. Tan solo hay que poner todas en armonía y darles el contraste que necesiten.

Con respecto a su equipo de trabajo, Robbie valora mucho la colaboración y le gusta confiar en su grupo para poder delegar en ellos muchos aspectos de su trabajo. Un ejemplo de ello es Rob Pizzey, colorista con el que colabora de forma recurrente.

Nuestro protagonista ha dirigido numerosas películas, en sus comienzos sobre todo dirigía largometrajes irlandeses y británicos. Como mencionábamos antes, es un frecuente colaborador en las películas de Andrea Arnold. Con esta directora empezó a dar sus primeros pasos en el mundo del cine a través de películas como «Red Road» (2006), «Fish Tank» (2009) y «Wuthering Heights« (2011), por la cual el dop ganó una Osella dorada en el festival de Venecia, y «American Honey» (2016). Junto a Ken Loach ha trabajado en películas como «The Angels´Share» (2012), «Jimmy´s Hall» (2014), y «Yo, Daniel Blake» (2016). Con Yorgos Lanthimos ha realizado algunas películas que le han hecho consolidarse como uno de los mejores directores de fotografía de nuestros tiempos. Gracias a «The Favourite» (2018) consiguió hacerse con su primera nominación para el BAFTA y el Premio de la Academia a la Mejor cinematografía.

Gracias a «Poor Things« (2023), de Yorgos Lanthimos, Robbie Ryan ha estado nominado este año a mejor director de fotografía en los Oscar. Ha tenido múltiples desafíos al realizar la fotografía de este largometraje, entre ellos, las dimensiones del estudio, ya que nunca antes había trabajado en uno de esta magnitud.

Fotograma de la película «Poor Things» (2023)

El dop tuvo que encargarse de la iluminación entera de un set, algo que fue completamente nuevo para él. No obstante, como estamos acostumbrados con Robbie, su parte favorita de la fotografía en el rodaje fue la luz natural.

“Pero mis tomas favoritas fueron las que no tenían luces, cuando a través de las ventanas entraba la luz natural, debido a que en el set en el cual rodábamos había muchas ventanas”.

El manejo de cámara en Poor Things ha sido toda una novedad para el director. Yorgos Lanthimos quería una película con muchos zooms, pero que fueran invisibles para el público. Este toque tan peculiar hace que la fotografía de «The Favourite« (2018) sea muy distinta a la de esta nueva película.

La luz natural es uno de los puntos más fuertes del director y casi siempre es la única fuente que utiliza. Solo suplementa su trabajo si es necesario. A nuestro protagonista le encanta la retroiluminación de forma sutil, por ello tiene preferencia por rodar en localizaciones donde la luz cae detrás del fotograma. Para conseguir esta cualidad tan característica del director hace uso de la luz que rebota, por ejemplo, usando fuentes más suaves que se difunden mejor como leds o Kino Flos.

Un claro ejemplo de esto es «The Favourite« (2018), anteriormente mencionada. El largometraje fue grabado prácticamente sin luz artificial, usando tan solo la luz que entraba de forma natural a través de las ventanas. Las escenas de noche, como es evidente, contaron con luz artificial para tener suficiente exposición para poder ser grabadas. Para una de estas escenas Robbie Ryan usó una lámpara Blanket-Lite de Kino Flo, colocada a lo alto para proporcionar un ambiente más relajado. Su gran área, así como su capa de difusión, produce una luz suave y uniforme.

“Hicimos una preparación en la que colocamos un montón de velas, las pegábamos y las envolvíamos con un reflector. Pasamos por unos cuantos modelos antes del definitivo”.

Fotograma de la película «The Favourite» (2018)

En cuanto al formato de sus películas, Robbie Ryan tiene preferencia por grabar en 35mm. No obstante, en algunas películas ha tenido que grabar en digital como en «American Honey« (2016), la cual grabó con una Arri Alexa XT, como marcaba el presupuesto.

Sus cámaras favoritas son las Arri, como la Arricam Studio, la Arricam Lite para 35mm y la Arriflex 416 para películas en 16mm.

Prefiere la película Fujifilm como los negativos Eterna 400T. Sin embargo, desde que Fujifilm ha dejado de comercializarlos, suele trabajar con la película Kodak, concretamente los negativos Kodak 500T, con los que incrementa el grano y la textura en las imágenes.

Con respecto a los lentes, nuestro protagonista usa varias como la Arri/Zeiss Master Prime y la Canon 11-165mm zoom para 16mm. Aunque sus lentes favoritos son los Panavision Primo, los cuales usa de forma recurrente cuando graba en 35mm. Este objetivo gran angular fue usado en el largometraje «The Favourite« (2018). Además, Robbie quiso ir más allá usando los lentes extremos ojo de pez Panavision SF6 T2.8. Ningún filtro ND cubría correctamente los objetivos, por ello Ryan tuvo que usar los negativos 50D de Kodak para los exteriores y así disparar de forma aceptable sin necesidad de luego tener que filtrarlos.

Debido a la simpleza del estilo fotográfico de Robbie Ryan, como estabilizador suele usar un trípode o una dolly con cabeza fluida. En ocasiones también usa un steadicam o un gimbal, como por ejemplo el Letus Double Helix. Éste es capaz de estabilizar el peso de una cámara 35mm más pesada cuando necesita un rodaje de seguimiento con actores más estable.

Le gusta manejar la cámara él mismo. Además, si la historia lo necesita, graba directamente con sus manos con la finalidad de inyecta energía y movimiento a las imágenes.

Es complejo definir a Robbie Ryan y encasillarle en un único estilo de fotografía, puesto que es mayormente conocido por su flexibilidad y adaptabilidad dependiendo del director con el que trabaje. A pesar de esto, a muchos directores les apasiona su estilo propio a la hora de usar la luz natural y desnuda, sus visuales con textura y su filosofía combinada con su técnica. Es considerado uno de los mejores directores de fotografía contemporáneos a la hora de captar el material para contar historias sociales.